Conjunto de dibujos a tinta sobre papel en que el tema ha venido generalmente sugerido por las mismas manchas y pinceladas iniciales, aplicadas de manera intuitiva. Tal vez algunas de estas obras servirían como ilustraciones, pero tanto sus dimensiones como el efecto brillante de la tinta china sobre el papel couché las aproximan decididamente a la pintura.
Manipular pictóricamente una fotografía. Dicho de otra manera, tratar de transformar una foto de una revista en una pintura. En ello consiste básicamente esta serie, tanto si se remarcan los elementos reales de la foto para otorgarles un sentido diferente del original como si la finalidad es obtener una pura composición abstracta. El acrílico parece el medio técnico más adecuado.
Un conjunto de composiciones figurativas en tinta y acrílico sobre papel, madera o tela. Aunque presentan un carácter claramente narrativo, no responden al propósito de ilustrar ningún argumento concreto, sino sencillamente al hecho de inspirarse en manchas de tinta aleatorias para hallar figuras y crear temas pictóricos.
El dibujo es un lenguaje que permite la máxima espontaneidad. Más próximo y directo que la pintura, estimula la creación continua y da salida inmediata al mundo interior. Estas piezas, en tinta sobre papel y con ocasionales toques de blanco, exponen gráficamente ideas sugeridas por las mismas manchas y garabatos.
Una colección de cuadros al óleo en formatos muy diversos. Se les podría llamar “abstracciones paisajísticas”, ya que se trata de obras abstractas que recuerdan vagamente paisajes o bien, visto de otra manera, de representaciones de paisajes o plantas que se aproximan a la abstracción.
PAISAJES PEQUEÑO FORMATO (2003)
Otra serie limitada de cuadros con una idea muy definida: paisajes casi abstractos trabajados en acrílico, tinta y, ocasionalmente, collage y ceras. Todos del mismo tamaño y sobre idénticos soportes de madera que con frecuencia se entreven bajo la pintura.
Serie realizada sobre maderas de tamaño reducido, con una combinación de técnicas basada en el acrílico y siguiendo un método de trabajo inspirado en el expresionismo abstracto. La disgregación de las formas no hace desaparecer totalmente las reminiscencias figurativas.
La extensión a tres dimensiones de las anteriores investigaciones en pintura y dibujo da lugar a esta serie de relieves sobre madera elaborados con acrílico, madera y piedras. Aunque predomina en ellos la idea de dispersión, sus elementos y formas generan en algunos casos nuevas asociaciones con imágenes reales.
Cuadros básicamente abstractos que combinan elementos pictóricos surgidos de la simplificación esquemática de formas reales: una franja vertical evoca un árbol o una columna, una mancha verde puede significar vegetación, etc. A veces un tema “literario” ha servido de punto de partida, aunque ya no se reconozca en la obra definitiva…
Aquí también la esquematización tiene un papel esencial, pero el grado de abstracción no es tan acusado. En cambio, se juega con las cualidades de diferentes materiales para conseguir texturas y efectos táctiles más que puramente coloristas. Una vez más, una idea inicial inspira el proceso.
Una diversidad de propósitos y de estéticas ha dado lugar a lo largo del tiempo a piezas que, aun presentando una considerable variedad, pueden agruparse dentro del ámbito común de la figuración. Aquí caben desde estudios del natural hasta temas simbólicos o mitológicos.
La figuración habitual se orienta aquí decididamente hacia el estudio del natural en un grupo de obras trabajadas con rigor a partir de la observación directa de la realidad visible. El interés por la percepción óptica del mundo y su representación pictórica siempre ayuda al artista a afinar la visión y la mano.
Manchar papeles con tinta china sin ninguna intención previa, someterlos a la acción del agua para que las manchas tomen un aspecto más orgánico y a continuación concretar las formas que estas manchas dejen adivinar. Una manera de emplear el azar para estimular la imaginación.
Una muestra de trabajos de ilustración realizados para diversas editoriales. Presentan estilos diferentes, según su finalidad, pero tienen características en común con las series de cuadros y dibujos anteriores, ya que la estética es, en esencia, la misma.
Versión personal de una de las leyendas antiguas más populares en Cataluña relacionadas con Montserrat. En cuanto al estilo de las ilustraciones, y dada la dificultad de actualizar un tema tan plenamente medieval, se ha optado por una figuración naturalista, por creerla adecuada para la evocación de un mundo tan lejano y, a la vez, para describir al personaje y su peripecia.
Se ha querido representar esta popularísima historia con fidelidad al modo como se suele contar, si bien se ha incorporado algunas escenas y detalles no incluidos en el relato habitual. Como apéndice, una versión “alternativa” de la leyenda obtenida recortando fotos de revistas y retocándolas con acrílico.